La Guardia Civil investiga las causas del asesinato de J.A.F. en la noche del martes en una casa a las afueras de Sencelles. La inspección ocular continúa para la obtención de pruebas o pistas del asesinato del hombre de 57 años. La investigación ha destacado la 'extrema violencia' del crimen y el ensañamiento 'terrorífico'. La autopsia ha confirmado que murió el pasado lunes.
Se guarda secreto en torno a la investigación, centrada en el análisis del lugar de los hechos en busca de indicios para esclarecer el móvil del crimen. No se descarta el robo y que el fallecido hubiera sorprendido al ladrón. Sea como fuere, todo apunta a que J.A.F. y su asesino se enzarzaron en una violenta pelea. El fallecido fue golpeado y apuñalado por un arma blanca, posiblemente un cuchillo de gran tamaño que no ha aparecido. La víctima fue encontrada sin vida en la noche del pasado martes por su hermana aunque la auropsia confirma que murió el lunes. El cuerpo presenta numerosos golpes y heridas además de un dedo amputado.
El Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) está buscando dentro del pozo de la finca donde fue hallada la víctima, donde el autor podría haber arrojado el arma blanca con la que presuntamente se cometió el crimen. Una veintena de agentes prosigue con la inspección ocular de la finca.
Según apuntan fuentes de la Benemérita, J.A.F. 'no era un hombre problemático' y vivía solo.
