Supone un aumento del 23% respecto al 2015
Según las estadísticas de transacciones inmobiliarias publicadas por el Ministerio de Fomento, obtenidas a partir de los datos que trimestralmente proporciona la Agencia Notarial de Certificación, muestran que los valores declarados en las compraventas de viviendas libres elevadas a escrituras públicas ante notario durante el 2016 sumaron la cifra de 3.541 millones de euros. Hay que resaltar que hablamos de precios declarados en la escritura, que pueden alejarse del precio real pactado y pagado entre las partes en la compraventa.
En comparación con otros años, supone un incremento del 23% respecto al año anterior, que alcanzó un valor total de 2.879 millones €. Este indicador revela un mercado inmobiliario dinámico en la actualidad en el ámbito territorial de la comunidad autónoma de las Illes Balears. Corroborado con otra estadística del sector, como es el aumento del número de transacciones inmobiliarias de un 22,3%, número en consonancia con las variaciones de los precios mencionados, y que explicarían su crecimiento. Además, aunque también existe a nivel nacional un movimiento al alza en el mercado inmobiliario, el ritmo de progresión balear ha sido superior que la tasa estatal, que fue del 17%. El valor total declarado para todo el país cerró con 60.837 millones €, por lo que nuestras islas representan el 5,8% de la tarta inmobiliaria española.
Esta corriente ascendente en el archipiélago fue mayor en las viviendas de segunda mano que las nuevas intercambiadas el año pasado. La cuantía correspondiente al inmueble usado obtuvo una adición de 3.207 millones €, lo que supone una cuota de mercado de más del 90%, con una tasa de variación positiva del 26,7% respecto a los valores del 2015.
El otro 9,4% de las compraventas recaen en las viviendas nuevas, datos que explicarían más el dinamismo o no del mercado de promoción inmobiliario, alcanzó la cantidad de 334 millones €, y se tradujo en un descenso en el valor total de los inmuebles intercambiados del -3,59%.
Al analizar las cifras con las anteriores obtenidas antes de la crisis, el valor total declarado del año 2016 se ha reducido en un 31,8% respecto al año 2006, que se corresponde con la mayor cuantía cambiada de manos desde que se publican estas estadísticas, cuyas transacciones inmobiliarias de vivienda libre obtuvieron una valoración agregada de 5.196 millones €.
La peor cifra en precios declarados se corresponde con el año 2013, periodo de fuertes restricciones crediticias en la economía española, cuyo agregado de los mismos fue de 1.661millones €, un 42% inferior al 2016. Este valle del 2013 en los precios totales declarados en las escrituras notariales muestra una bajada de las cuantías de los bienes vendidos del 68% respecto al año que se consiguió el valor máximo, 2006.
De hecho el dinamismo vivido en el año previo dista mucho del acontecido en ese periodo temporal del 2006. El número de transacciones realizadas ante notario de viviendas han sido un 39% menor, como expone el indicador, al pasar de las 26.014 escrituradas en el último año sin atisbo de crisis a las 15.844 en que cerró el 2016. Estas cifras explicarían las diferencias entre esos años en el valor agregado intercambiado anualmente antes citado, y no tanto por posibles diferencias entre el precio declarado y el real de compraventa, en el sentido que en la actualidad esa brecha no es superior a la sufrida antes de la crisis.








