El Ajuntament de Palma está negociando con los restauradores, comerciantes y vecinos del Passeig del Born una salida aceptable para todos con el asunto de las terrazas que están instaladas desde hace unos años. Tras el anuncio hecho en el mes de julio por parte de la regidora Aurora Jhardi de eliminar las terrazas antes del inicio de la temporada turística de 2016, el consistorio parece haber recapacitado y ha puesto sobre la mesa una propuesta alternativa consistente en ubicar las terrazas en un lateral del paseo. Los restauradores por su parte proponen ocupar menos espacio público y hacer las terrazas más estrechas para que así haya más espacio para los viandantes.
Aunque las posiciones son aún divergentes, al menos hay diálogo y negociación, lo cual siempre es una buena noticia. El Ajuntament parece haber reconsiderado su propuesta inicial de suprimir las terrazas, medida absolutamente radical que supondría pérdida de puestos de trabajo y además acabaría con el encanto que el Born ha ganado desde que fueron colocadas las sillas y mesas de los establecimientos de restauración. Hay que reconocer lo positivo de este cambio de criterio y la predisposición del Ajuntament que lidera José Hila para buscar una solución consensuada con los afectados. Este es el camino.





