Los datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social revelan que Balears es una de las comunidades autónomas con menor conflictividad laboral, con un descenso importante en el número de huelgas convocadas en lo que va de año. Esta es una buena noticia que enmarcada en un contexto de crecimiento económico y de generación de empleo, ratifica la buena marcha de la economía balear. Hay que destacar que las organizaciones sindicales en Balears han sufrido una importante renovación en sus cúpulas directivas y que eso también ha facilitado el entendimiento con la patronal. La moderación y el diálogo parecen caracterizar las relaciones entre sindicatos y asociaciones empresariales, lo cual es sin lugar a dudas un aspecto positivo que facilita la paz social y la resolución de los conflictos por procedimientos razonables y no traumáticos.
Todos los agentes sociales deben tomar conciencia de su responsabilidad en la buena marcha de la economía y ahora que los vientos soplan a favor, aprovechar el tirón y evitar las posiciones que supongan entorpecer la coyuntura. Y conviene reconocer el papel de mediación que a menudo lleva a cabo el Govern de les Illes Balears cuando surge un conflicto, lo que siempre ayuda a que eludir medidas extremas como la huelga, que nunca son deseables ni benefician a nadie.