El entrenador del conjunto alemán ha decidido cambiar de oficina. Guardiola dejará de trabajar en el Allianz Arena y se marchará fuera del estadio del Bayern para que los jugadores estén más a gusto sin tener cerca su presencia.
Según informa 'Bild', Pep quiere que sus chicos tengan libertad para poder hablar con libertad, aunque sea de él. "Los jugadores quieren hacer bromas y hablar de todo sin el temor a que yo esté sentado a sus espaldas y pueda oírlos. Así también podrán hablar mal de mí", confesaba.
Jupp Heynckes, su antecesor, ya tomó esa decisión la temporada pasada mirando por el bienestar de sus jugadores. Viendo el precedente, y los títulos logrados, parece queGuardiola ha querido seguir el ejemplo de su colega.
El cuadro alemán, tras perder con estrépito la Supercopa de Alemania, continúa preparando la gran cita del verano: laSupercopa de Europa el próximo día 30 de agosto ante el Chelsea de Mourinho.







