La Comisión Nacional de Discapacidad del PP ha celebrado en Bruselas un encuentro con el eurodiputado que preside en la actualidad el Intergrupo de Discapacidad de la Eurocámara, Ádám Kósa, con el objetivo de presentar propuestas y coordinar esfuerzos de cara a impulsar políticas de integración dirigidas a los casi 80 millones de europeos que sufren algún tipo de discapacidad y que necesitan de una acción más resuelta, tanto a nivel comunitario como en sus respectivos Estados. Los miembros de la Comisión, entre los que se encontraban las eurodiputadas Rosa Estarás y Verónica Lope y los miembros de la Comisión de Discapacidad del Congreso de los Diputados Francisco Bañó e Inmaculada Bañuls, trasladaron a Kósa la labor que este órgano está desarrollando en el Congreso de los Diputados y en el Senado, y su propuesta para que el Parlamento Europeo cree una comisión específica de discapacidad, como la que existe en España. Así, se atendería mejor las numerosas cuestiones todavía sin resolver y se avanzaría hacia una verdadera política de igualdad para este colectivo tan amplio de ciudadanos. En este sentido, desde el PP se transmitió también la importancia de crear un Pacto Europeo por la Discapacidad que impulse las medidas necesarias y acabe con las diferencias que existen entre los Estados miembros, algunas de las cuales son muy perjudiciales para las personas con discapacidad. Como ejemplo, señalaron la situación en España en relación con la vivienda, que dificulta mucho la realización de las reformas necesarias para garantizar la movilidad de las personas con dificultades. La Comisión considera que la creación de un pacto a nivel comunitario permitiría adoptar las buenas prácticas del resto de países europeos y superar las deficiencias nacionales. En el encuentro se habló de la necesidad de situar la discapacidad como una cuestión prioritaria en la agenda de la política europea. En España, destacaron desde esta Comisión del PP, se está también tratando de lograr una mayor atención a estos asuntos, para lo que se han planteado varias peticiones en el Congreso de los Diputados, como la creación de cuentas satélites que permitan medir el impacto de la discapacidad sobre la economía mundial y europea o la emisión de billetes de euro en braille. Para seguir avanzando, por lo tanto, se trató de la conveniencia de crear un canal permanente de comunicación entre el Parlamento Europeo y el Congreso de los Diputados y se acordó la organización para el año próximo de un encuentro a nivel europeo con representantes de los parlamentos europeos que sufran alguna discapacidad. También se habló de la conveniencia de impulsar una declaración escrita en la Eurocámara sobre la promoción y fomento del braille. Además, propusieron a Kósa medidas específicas como la creación de una Agencia Europea sobre Enfermedades Raras; condicionar las ayudas de las instituciones europeas a que los proyectos financiados acaten las condiciones de accesibilidad; exigir la obligatoriedad de informes previos de evaluación de impacto de cualquier norma o plan comunitaria para determinar su efecto sobre las personas con discapacidad; dar prioridad en los Fondos Estructurales a las acciones orientadas a impulsar los derechos de las personas con discapacidad; promover que los planes comunitarios de inversión en I+D se dirijan al diseño para todos, a la accesibilidad universal y a la autonomía personal; establecer un Código Europeo de buenas prácticas en cuanto a las personas con discapacidad; e incluir a las organizaciones más representativas de la discapacidad en los órganos de la UE que traten cuestiones de interés para las personas con discapacidad. El eurodiputado húngaro mostró su interés por trabajar en todas estas cuestiones y también por estrechar lazos con el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), una organización con la que se reunieron hace unos días también los miembros de la Comisión Nacional de Discapacidad del PP.





