Protesta de los trabajadores del aeropuerto de Palma para exigir mejoras laborales en numerosos ámbitos. La organización ha exigido la creación urgente de una mesa de diálogo tripartita, con presencia de Aena, el Govern balear y los representantes sindicales, con el objetivo de buscar soluciones estables a lo que consideran “atropellos” hacia las plantillas.
Durante la concentración, los trabajadores han advertido que, si no se escuchan sus demandas, están dispuestos a intensificar las movilizaciones hasta llegar a la paralización del aeropuerto en pleno mes de agosto.
JORNADAS INSAUMIBLES Y CONTRATOS PRECARIOS
UGT ha denunciado que las empresas que operan en el aeropuerto no respetan los derechos laborales. Entre las prácticas más criticadas figuran la organización de turnos “inhumanos” que impiden la conciliación personal y la proliferación de contratos por debajo de las 30 horas semanales, combinados con “innumerables horas extras sin control”.
Además, los trabajadores exigen una planificación adecuada de las vacaciones, progresiones profesionales justas y la contratación de personal cualificado para las tareas de conducción y supervisión, con el fin de evitar la sobrecarga de trabajo.
EXPUESTOS AL CALOR Y SIN CANTINA
El sindicato ha alertado también sobre las condiciones materiales del trabajo. Reclaman vehículos y equipamiento adecuados para soportar las altas temperaturas, así como uniformes que no vulneren su dignidad y que incluyan chubasqueros ante posibles lluvias.
Otra de las reivindicaciones históricas es la habilitación de un aparcamiento gratuito para los trabajadores y la puesta en marcha de una cantina con precios asequibles. En este sentido, han lamentado que las empresas ignoren de forma sistemática las comunicaciones de los sindicatos, socavando su capacidad de representación.
EMPRESAS SEÑALADAS Y OBRAS INTERMINABLES
UGT ha acusado a compañías como Swissport, Groundforce, Menzies, EasyJet, Pasarelas, Eurowings, PMR's, Jet2, Ryanair o South de prácticas que rozan la explotación laboral. También han puesto el foco en las “interminables” obras del recinto aeroportuario, que, según denuncian, están afectando gravemente a la salud de las plantillas y comprometiendo su seguridad.
El sindicato responsabiliza a Aena de todas estas deficiencias y le insta a actuar como mediadora. Si no hay avances, advierten de un verano conflictivo en uno de los aeropuertos más transitados del país.