Se llama Daniel Lau, y es un joven chino que junto a dos de sus amigos han decidido hacerse el selfie más vertiginoso visto hasta ahora.
Junto a dos de sus amigos decidieron subirse a uno de los rascacielos más altos de la ciudad de Hong Kong para grabarse y mostrar al mundo su logro. Sin duda uno de los selfies más peligrosos vistos hasta el momento.