La institución insular ha informado que la iniciativa supondrá una inversión de 1,2 millones de euros e incluirá la instalación de 210 dispositivos entre radares, cámaras y contadores de vehículos. En el caso de la Serra, el sistema cubrirá 32 zonas y se prevé que esté completamente operativo a finales de 2026.
RESPUESTA A LAS DEMANDAS MUNICIPALES
El presidente del Consell, Llorenç Galmés, ha destacado que el proyecto da respuesta a las quejas de varios ayuntamientos de la zona y contribuirá a mejorar la seguridad y la convivencia. El plan se había retrasado hasta recibir la homologación de la Dirección General de Tráfico (DGT), requisito imprescindible para poder aplicar sanciones.
MÁS SEGURIDAD Y DATOS DE TRÁFICO
Una vez operativo, el sistema enviará las imágenes captadas a la DGT, que es la autoridad competente en materia sancionadora. Además de reforzar la seguridad vial, los datos servirán para analizar el flujo de tráfico y planificar futuras mejoras en la red viaria.
DUPLICACIÓN DE LOS PUNTOS DE CONTROL
Con esta actuación, el Consell duplicará los puntos de control en la red insular, pasando de 53 a 105 dispositivos. Las cámaras antiguas serán sustituidas por equipos modernos capaces de vigilar, contar y clasificar vehículos, incluidas las bicicletas.
OBJETIVO: MÁS TRANQUILIDAD Y EFICIENCIA
El proyecto, inicialmente limitado a 30 cámaras, se amplió a petición del Govern balear, la Guardia Civil y varios ayuntamientos. Su meta es aumentar la tranquilidad ciudadana, ofrecer información útil a los cuerpos de seguridad y medir con precisión la presión del tráfico para orientar futuras actuaciones.







