Daba la sensación cuando alguno leía determinados comentarios que Bauzá tenía miedo escénico y que no quería entrar en el Parlament. Sin embargo, Bauzá ejercerá de jefe de la oposición y no se esconderá en los pocos plenos que faltan para acabar la legislatura, lo que es una buena noticia para los ciudadanos y, sobre todo, para los que seguimos las noticias políticas. Bauzá ha hecho bien en esperar su turno para entrar en el Parlament. Hubiese sido injusto que algún compañero fuera forzado a dimitir para dar entrada al político de Marratxí. Bauzá ha entrado cuando tocaba y eso es bueno desde el punto estético, que ya es mucho en política. Ahora veremos cómo se desenvuelve en los debates parlamentarios, pero Antich ya debe verse como ganador. El president parece que va sobrado, algo que sorprende después de revolcón político del que fue objeto en el último debate autonómico por parte de Antoni Pastor. La cosa se pone interesante.
