El presidente del Banco Santander, Emilio Botin, asegura en una carta a los accionistas que la entidad “no necesita otras adquisiciones”, mientras su banco han pedido informes al Banco de España sobre el estado de la alicantina Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM). A falta de dos semanas para que CAM encuentre un comprador que se haga con ella sin necesidad de ayudas públicas, ocho entidades han solicitado información sobre la caja, entre ellas los cuatro mayores bancos españoles, BBVA, Popular, Sabadell y el propio Santander, según publican varios medios. Pero Botín recuerda a los accionistas de su banco que las compras realizadas en el último año en México, Alemania y Polonia, aportarán 750 millones a los resultados del grupo en 2013, y que por ello, no hacen falta más adquisiciones “para crecer en los próximos años”. Las compras han sido compensadas con las ventas, ha precisado el banquero cántabro, ya que, “en conjunto, el importe invertido es aproximadamente igual al ingresado por las ventas, alrededor de 14.000 millones de euros, con un impacto prácticamente neutro en el capital del grupo”. Mientras tanto, las entidades que han manifestado su interés al banco de España sobre la caja alicantina centran su petición de datos en el nivel de morosidad de los grandes clientes de CAM, así como la concentración de préstamos. Santander y BBVA parten como favoritos para hacerse con la CAM, dado que su tamaño les permitiría absorber los problemas de ladrillo de la caja con relativa facilidad. El banco que preside Emilio Botín ya dijo en el pasado que la red de CAM era, entre todas las cajas, la que más le resultaría complementaria.





