Albert Moragues, conseller de Presidència, anunció ayer en IB3 Ràdio que el Govern va a aplicar un severo plan de recortes del gasto en la Administración autonómica. Exactamente tres años después de que el presidente Antich declarara públicamente que el Gobierno estaba en quiebra económica, después de que en tres presupuestos consecutivos fuera incapaz de reducir el gasto porque sus socios de gobierno se opusieran, ahora parece que sí va a llegar la tijera del ahorro, cuando las arcas de la Comunidad Autónoma no tienen más recursos. Según Moragues, se pasará de 169 a 82 empresas públicas, un plan más severo que el que se anunció hace un año pero que no se puso en práctica. En algunas declaraciones a los medios de comunicación, el president dijo que era muy difícil llevar a cabo el recorte de empresas que había prometido porque cuando se creaba una empresa era difícil desmontar la estructura. Según anunció Moragues, el primer paso en esta línea será la fusión de Ibavi, Ibisec y CAIB Patrimoni, tres empresas públicas que se dedican a lo mismo, pero en tres áreas diferentes del Govern. Esta fusión estaría muy próxima. En su comparecencia en la radio, Moragues no dio más explicaciones sobre la situación financiera de la comunidad. Aunque el Govern mantiene un secretismo importante sobre este tema, todo apunta a que en este mandato se está aplicando un recorte del gasto del 33 por ciento. Al menos, en el antiguo Ibatur, al inicio del ejercicio, Hacienda impuso una restricción de estas dimensiones, lo cual motivó las dimisiones de las responsables de este organismo. Sin embargo, hasta el momento estos datos se han negado tajantemente. Hay que recordar que en Baleares el presupuesto que está en vigor es desconocido puesto que se trata del de 2010, prorrogado, pero que ha quedado a todas luces fuera de lugar en la nueva situación económica.
