La consellera de Familias, Bienestar Social y Atención a la Dependencia, Sandra Fernández, ha asegurado que se ha sentido “decepcionada” tras la reunión mantenida este lunes con el secretario de Estado de Infancia y Juventud, Rubén Pérez, y ha explicado que el Ejecutivo central no ha contemplado por ahora la posibilidad de excluir a Baleares del reparto de menores.
Fernández ha lamentado que la respuesta del Gobierno se haya limitado a “vaguedades” y “palabras vacías”, y ha señalado que, aunque Pérez ha indicado que estudiará medidas, “la posibilidad planteada por el Govern no está sobre la mesa”. “Seguimos igual y sin soluciones por parte del Gobierno central. No sabemos qué han hecho para frenar la llegada de migrantes y el Ministerio no nos ha dado soluciones ni ha atendido a esta petición tan concreta”, ha afirmado la consellera.
No obstante, Fernández ha agradecido la disposición de Pérez a reunirse con las autoridades de Baleares y ha subrayado que ha quedado claro que el Govern no ha sido “racista”, en referencia a las críticas de la ministra de Infancia y Juventud, Sira Rego.
TRES DERIVACIONES YA ALEGADAS
La consellera ha confirmado que Baleares ya ha recibido tres notificaciones de traslado de menores migrantes desde otras comunidades, todas ellas han sido alegadas para intentar impedir los traslados. “En cuanto hemos recibido las notificaciones tenemos diez días para presentar alegaciones y así lo hemos hecho. Todavía estamos en estos procesos de alegaciones a la espera de la respuesta del Ministerio”, ha explicado Fernández.
Hasta el momento, no se ha tenido información sobre a cuál de las cuatro islas serían derivados estos menores en caso de que los traslados se efectuasen. Actualmente, los consells insulares han tutelado a 718 menores extranjeros no acompañados en el archipiélago.
LA POSTURA DEL GOBIERNO
El Gobierno ha afirmado que no contempla “otro escenario” que no sea que Baleares acepte el reparto de menores migrantes procedentes de Canarias y considera que los menores trasladados al archipiélago no supondrán “más tensión” en el sistema de protección.
Así lo ha indicado el secretario de Estado, Rubén Pérez, tras reunirse con Fernández y los consellers de Bienestar Social de los consells insulares. Pérez ha señalado que “se va a cumplir la legislación” y ha destacado que el Gobierno ha destinado seis millones de euros a Baleares para la acogida de menores, mientras que trabaja en una nueva partida de apoyo económico.
El secretario de Estado ha explicado que la reunión ha servido para abordar la situación de la infancia migrante en las Islas y conocer la casuística del archipiélago, y ha considerado positivo “sentarse a abordar con toda franqueza las divergencias sobre una decisión convalidada en el Congreso de los Diputados como es el Real Decreto Ley para la contingencia migratoria en Canarias, Ceuta y Melilla”.
Pérez ha detallado que el Gobierno y la Delegación en Baleares han realizado un seguimiento “muy importante” de la situación migratoria y que, aunque se ha producido un incremento de llegadas, no existe una contingencia migratoria. La respuesta del Ejecutivo ha consistido en aumentar la financiación y la ayuda al sistema de protección, pero no en aplicar un mecanismo de contingencia.
En concreto, los seis millones de euros provienen de una partida de 22 millones del Ministerio —dos millones para Baleares— y de la asignación de 100 millones para el reparto de menores —cuatro millones para el archipiélago—. Pérez ha subrayado que el Real Decreto Ley establece un reparto “equitativo, solidario y ponderado” y que el sistema de protección de menores de Baleares no ha alcanzado una sobreocupación extrema, aunque sí supera su capacidad ordinaria.
Asimismo, ha considerado que los recursos interpuestos por el Govern contra el reparto de menores son legítimos, pero ha insistido en que “no pueden imposibilitar la vía del diálogo y las relaciones bilaterales”.
REACCIONES DE LOS CONSELLS INSULARES
Los consellers de Bienestar Social de los cuatro consells han participado en la reunión junto con Fernández y el delegado del Gobierno, Alfonso Rodríguez.
El presidente del IMAS, Guillermo Sánchez, ha calificado el encuentro de “infructuoso” porque el Gobierno “no ha ofrecido ningún tipo de solución” y ha lamentado que no se disponga de inmuebles para acoger a más menores ni de financiación suficiente.
Por su parte, la consellera del Consell de Ibiza, Carmen Escandell, ha expresado su “decepción total y absoluta” y ha afirmado que “tenemos la sensación de que no se nos ha escuchado”. En Formentera, Cristina Costa ha reclamado recursos inmediatos y financiación, mientras que la representante de Menorca, Carmen Reynés, ha alertado sobre la delicada situación psicológica de los menores y ha subrayado la necesidad de que el Gobierno “actúe en origen” para frenar la migración.
Finalmente, el delegado del Gobierno en Baleares, Alfonso Rodríguez, ha agradecido la visita de Pérez y ha lamentado la ausencia de los presidentes insulares en la reunión, al tiempo que ha abogado por “huir de la confrontación gratuita y usar la migración como arma arrojadiza”, y ha destacado la importancia de la colaboración entre administraciones.








