Si el posado veraniego femenino cada año lo protagoniza Ana Obregón, debería estar escrito en algún sitio que Mario Casas nos tuviera que regalar un posado como el que ha compartido en su Instagram, pero todos los veranos.
En la foto, sin camiseta y a bordo, posa apoyado en la barandilla del barco mientras mira al infinito, una imagen que no ha tardado en hacerse viral.
No hay duda de que el amor le sienta muy bien al gallego, porque la sonrisa que Berta Vázquez le ha dibujado en su cara no desaparece en ningún momento.