A estas alturas de la película son de muy pocos tirando a ninguno los ciudadanos que no tienen duda alguna al respecto de que las operaciones de la Fiscalía Anticorrupción y los intereses del partido del presidente del Govern van por el mismo camino. Por eso no deja de llamar la atención que el mismo día –hoy- en que las formaciones políticas se ven obligadas por ley a retirar su propaganda electoral dada la aplicación de la prohibición de publicidad en precampaña, el PSOE pueda sacar un nuevo rédito electoral mediante la técnica habitual de acoso y derribo al contrario. Al día siguiente de la visita a Palma en la que el ministro de Justicia ha dicho que la petición de cárcel para Jaume Matas “es un acto fundamentado en la ley, el aparato acusador del Estado irrumpe en el ayuntamiento de Ciutadella y, cuando han pasado ya casi cuatro años desde las últimas elecciones, se detiene al exalcalde del PP por unos presuntos hechos de la pasada legislatura relacionados con el organismo público Ciutadella Turisme (Citur) y la promoción turística. Habrá que ver en qué queda el caso y por dónde van los tiros pero, en principio y según los primeros datos, este nuevo episodio recuerda al planteado en el ‘caso Sant Elm’ en el que se persiguió al exconseller de Turismo Joan Flaquer hasta que el Tribunal Superior de Justicia de Baleares ordenó su archivo. Podría incluso ocurrir que la operación de Ciutadella acabe igual, archivada, pero el daño ya no se podrá reparar y quien se haya llevado algún beneficio no tendrá que devolverlo. Un bon negoci.
