El fabricante de fundas para iPod y para iPad LifeProof ha descubierto en los vídeos virales la mejor forma de vender sus productos. Su última idea va ya por cerca de los dos millones de visitas en YouTube y les ha servido para promocionar sus carcasas para iPhone resistentes al agua. La historia es la siguiente:
El turista californiano Gregory Papadin se encontraba de vacaciones en Menorca, nadando en alguna de sus calas y grabándose mientras tanto con su iPhone 5; el teléfono decidió entonces darse un pequeño chapuzón por su cuenta. Se le resbaló de las manos a su dueño y se hundió en el agua hasta tocar fondo, grabando con su cámara todo el proceso. El iPhone 5 fue recuperado a los dos minutos por el capitán del barco alquilado en el que navegaban Papadin y sus compañeros. Este es el resultado:
En la sección de comentarios del vídeo se pueden ver varios comentarios de la cuenta oficial de LifeProof en los cuales "pide permiso" a Papadin para compartir su vídeo a través de sus canales sociales.






