La Federación Hotelera de Eivissa y Formentera ha difundido un comunicado donde se destaca que Barcelona muestra el camino a seguir.
“La explotación profesional de pisos particulares tiene varios efectos inmediatos y perjudiciales para las ciudades y su población residente”, sostiene el comunicado. Uno de estos efectos perjudiciales es la disminución y encarecimiento de la oferta de viviendas para uso residencial. “En Ibiza es ya un problema sin solución para muchas familias de trabajadores. En Formentera aún más”.
La FEHIF critica que el Govern vaya a legislar regularizando los pisos con el razonamiento de que “es algo que existe, que no podemos evitar, y por tanto, mejor regularlo”.
“Hay que perseguir a quienes venden en sus poderosas páginas webs alojamientos no legalizados. Tenemos que aprender de Barcelona. Un edificio urbano, completo, y cumpliendo la normativa turística, como todos, puede ser perfectamente dedicado al turismo”, apuntan los hoteleros.
Sin embargo, lamentan que “sin la implicación de los Ayuntamientos y del Consell Insular, es imposible lograr disuadir a los miles de propietarios e inquilinos que hoy día realizan la explotación profesional de pisos particulares. Y ello pasa por tomar medidas contundentes y eficaces, pidiendo las reformas legales necesarias en su caso para hacer cumplir la ley, y lograr el objetivo de un turismo rentable y no molesto para los residentes”.
Además, los hoteleros echan de menos “claridad de ideas y las ganas de lograr resultados que vemos en Barcelona. Esperemos que la nueva regulación haga que la próxima temporada las autoridades competentes (que son todas, municipios, Consell y Govern) consigan resultados prácticos. De no ser así, tendremos un futuro turístico, a pesar de la buena temporada que hasta hoy disfrutamos, cada vez de menor rentabilidad y más molesto e incómodo para los residentes”, apostilla el comunicado.







