En este trimestre veraniego las temperaturas se mantendrán más elevadas de lo habitual y, a más corto plazo, durante la última semana de junio y primera de junio lo más probable es que continúe el calor intenso, con la posibilidad de que se formen tormentas, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Tras una primavera muy lluviosa, el inicio del verano ha llegado precedido de una semana de mucho calor, con máximas de hasta 40 grados en algunos puntos, acompañadas de tormentas fuertes con granizo, viento y lluvia en buena parte de la península.
Las temperaturas tórridas se han dejado notar esta semana especialmente en puntos del sur, donde el pasado jueves se batieron dos récords para un mes de junio, señala la Aemet en sus redes sociales.
El de temperatura máxima para un mes de junio se registró en la ciudad de Huelva, donde el termómetro escaló hasta 41,1 grados; el récord de mínima más elevada, con 25 grados, se produjo en Morón de la Frontera (Sevilla).
El primer del día del verano mantiene la situación anticiclónica en la mayor parte del país, aunque durante la tarde se esperan tormentas, con fuertes rachas de viento y granizo en diversos puntos.
La Aemet ha activado avisos en catorce comunidades autónomas por estos fenómenos, además de por viento en Canarias. Los más significativos son por calor, de nivel naranja (riesgo importante), en Andalucía, con máximas de 40 grados en Córdoba y Jaén, que se pueden superar en las proximidades del Valle del Guadalquivir.
Pero no solo en el sur se nota ese calor. En la Ribera del Ebro de Zaragoza el aviso también es naranja por esos mismos 40 grados, el mismo nivel de alerta que en el sur de Huesca y en la depresión central del Lleida, donde se pueden llegar a 39.
Por capitales de provincias, la máximas se prevén de 40 grados en Córdoba y Zaragoza, 38 en Ciudad Real y Murcia; 37 en Jaén, Huesca y Logroño. A las 13.00 horas, la temperatura más alta se había registrado en La Roda de Andalucía (Sevilla), con 37 grados.
El actual episodio de calor empieza a dar una ligera tregua ya desde hoy, al menos en el tercio occidental y el Cantábrico, donde las temperaturas descienden.Desde mañana, el acercamiento de una dana desde el Atlántico favorecerá un aumento de la inestabilidad al inicio de la semana próxima y dejará chubascos y tormentas en amplias zonas de la mitad nordeste peninsular y el extremo norte.
Las temperaturas máximas está previsto que mañana desciendan ligeramente en la mayor parte de la Península, aunque se esperan superar los 34-36 grados en amplias zonas de la mitad sur y nordeste peninsular y Baleares, e incluso alcanzar los 38 en valles de la mitad sur de la vertiente atlántica y del nordeste.
A lo largo de la semana, según las previsiones de la Aemet, seguirá el calor, aunque con un descenso térmico en el extremo norte y áreas del oeste y centro de la Península, que no llegará al tercio oriental ni a Baleares hasta el jueves, y no será tan acusado.Además, a partir del jueves volverá a apretar el calor en todo el país, con una recta final de la semana muy cálida.
De cara a este recién estrenado verano, las previsiones de la Aemet hechas públicas hace unos días, indican que se espera un clima más cálido de lo normal, sobre todo en la vertiente mediterránea y en ambos archipiélagos.
En concreto, los expertos anticipan una alta probabilidad (entre el 50 % y el 70 %) de que el trimestre que entra esté entre el 20 % de los más calurosos registrados en los últimos años.
