Si en vez de un elefante hubiera sido un pokémon como el que ilustra este viral, el capítulo de las disculpas reales quizá no existiría en la memoria colectiva de este país.
Está claro que estas criaturas no tienen ningún problema en colarse en todas partes y en todos los ámbitos. Un pokémon que hace de elefante y que ríe tras ser abatido. Curioso. ¿Por qué?






