Las declaraciones del conseller de Salut, el señor Vicenç Thomàs, amenazando con sacar del convenio a las farmacias que cobrasen íntegramente los medicamentos a los asegurados, no son de recibo. El conseller parece olvidar que, al no pagar a los farmacéuticos desde septiembre, el primero que ha incumplido el acuerdo es él, por lo que, en estos momentos, es el único que no está en disposición de amenazar a nadie. Han sido declaraciones impresentables, fuera de lugar y absurdas, cuando hoy por hoy, la Administración es la única que no cumple lo acordado y lleva a sus proveedores al borde la ruina. De vergüenza ajena.





