El entrenador del Sevilla, Unai Emery, ha protagonizado una notable polémica, al ser detenido en un control rutinario de alcoholemia y duplicar la tasa permitida.
Los hechos ocurrieron el pasado jueves en Valencia, ciudad en la que Emery fue entrenador durante varios años. El técnico conducía su Porsche Cayenne y fue detenido por los agentes de la autoridad.
Tras ser sometido a la prueba de alcoholemia y dar un resultado de 0,49 miligramos de alcohol por litro de aire espirado (casi el doble de lo permitido, 0,25), Emery fue trasladado a las dependencias policiales, donde se le notificó su sanción de cuatro puntos en el carnet de conducir, más una multa económica.
El propio Emery ha reconocido los hechos a través de la red social Twitter, afirmando que "aunque sólo se trate de una multa, pido disculpas porque soy consciente de que beber y conducir no es compatible, y las personas públicas tenemos que proyectar comportamientos ejemplarizantes a nuestros seguidores".
