Decía estos días que no entiendo cómo Antich pide que Zapatero venga a Baleares a la campaña electoral. No creo que tenga problemas en lograrlo porque en el resto de España no quieren verlo. Pero hay algo que es un indicador más certero del despiste del president balear: dice que tiene que venir porque el Estado ha hecho grandes inversiones en Baleares. Antich yerra radicalmente; la gran mayoría de los ciudadanos sabe que Zapatero no gestionó la crisis, que nos engañó muchas veces y que en buena medida la profundidad del agujero en el que estamos es responsabilidad suya. ¿Inversiones? El argumento de la inversión pública no le interesa a nadie, ni siquiera a los socialistas. Nadie se cree estas bobadas referidas a la mejora de la financiación o las inversiones invisibles. La gente quiere trabajo, empleo, una economía que funcione.





