Los mallorquines han salido a la pista dispuestos a prolongar sus buenas sensaciones. Un objetivo que han logrado en el primer cuarto, donde han conseguido siete puntos de renta (25-18).
En el segundo asalto, los ataques se han impuesto a las defensas. Eso sí, el intercambio de canastas ha beneficiado a los isleños, quienes han aumentado su diferencia hasta los ocho dígitos (50-42).
Tras el descanso, los visitantes han reaccionado hasta darle la vuelta al marcador a falta de unos últimos diez minutos (67-71) en el que han certificado su triunfo por 86-93.






