En el acto, organizado por el Govern y el Moviment Europeu, González y Roca han estado acompañados por los periodistas Rosa Paz y Andreu Manresa y el abogado Lluís Morell.
Felipe González ha destacado su talla política, ha dicho que él que "tenía una autonomía personal significativa" y que únicamente veía la política como un servicio.
"Era de verdad la tercera autoridad del estado", ha asegurado un Roca que subrayó que para servir solo hacen falta "la competencia, la buena fe y la voluntad" y lo ha descrito como "ejemplo de una cordialidad extrema, desde la discrepancia".
La presidenta del Govern, Marga Prohens, ha agradecido a los participantes en el coloquio que hicieran la transición y lo hicieran "tan bien". Ha defendido la UE como "más necesaria que nunca para hacer frente a las amenazas externas e internas" y como baluarte de los valores.
GRAN LEGADO
Considerado uno de los políticos más destacados de la transición española, ingresó en el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en 1975. Fue elegido diputado al Congreso por Baleares en la legislatura constituyente y diputado del Parlamento de las Islas Baleares, donde fue Consejero de Trabajo y Sanidad del Consejo General Interinsular de Baleares.
Fue designado ministro de Administraciones Públicas en el segundo gobierno de Felipe González (4 de julio de 1985). Tras las elecciones generales de 1986, tras ser de nuevo diputado, fue elegido presidente del Congreso de los Diputados por 322 votos a favor, de un total de 350 escaños, cargo en el que se mantuvo hasta 1996.
Hasta su fallecimiento ejerció como abogado y profesor de Derecho Mercantil en la Universidad de las Islas Baleares. Recibió, entre otros galardones, la gran cruz de la Orden de Carlos III y la Medalla de Oro de la Comunidad Autónoma de Baleares.