Una Nit de l'Art de y para el arte. La emblemática velada palmesana de puertas abiertas al arte volvió este sábado a sus orígenes, de arte sin marchas reivindicativas, ni música ni gritos y los galeristas y asistentes coinciden en que se podía "pasear y ver".
Después de dos citas especialmente convulsas, Palma arrancaba este sábado una Nit de l'Art con una afluencia pobre de público aunque poco a poco, las calles se fueron llenaron de visitantes nacionales e internacionales. Todos coinciden en que las aglomeraciones no han sido noticia.
Esta celebración anual marca el inicio de la temporada artística en Palma y quiere ser la versión mallorquina de la 'Nuit Blanche' que celebran otras ciudades en el mundo.
En su organización colaboran, además de diversos museos y galerías como Es Baluard o el Casal Solleric, Govern, Consell de Mallorca y Ajuntament de Palma.
Por otro lado, la Catedral ha mantenido abiertas sus puertas desde las 20 hasta las 23.30 horas, mientras que el Parlament ha abierto hasta la medianoche, para que los ciudadanos pudieran visitar el edificio y las obras de arte que contienen las estancias principales de la antigua sede del Círculo Mallorquín
