Mujeres que se despiertan en un lugar desconocido tras una noche que no recuerdan. Esta es la cruda realidad que se está dando cada vez con más frecuencia en países de Iberoamérica. ¿El principal instrumento? las drogas. Según ha informado BBC MUNDO, la mayoría de las víctimas no recuerdan lo ocurrido, y solamente mantienen el recuerdo de estar bailando y divirtiéndose en una discoteca.
Aunque en muchas ocasiones sí que son conscientes de haber estado con un hombre mientras se tomaban una copa en la barra, pero su memoria comienza a fallarles una vez se les pregunta por lo que sucedió después.
A pesar de que la memoria puede jugarnos una mala pasada, qué recuerdo más real que las propias evidencias, las propias marcas que las mujeres que han sido violadas encuentran en su cuerpo y ahí sí, es cuando se les despejan las dudas de esa fatídica noche.