La continuas llamadas a la precaución por parte de las autoridades sanitarias, choca con la sabiduría popular que, aveces, ofrece remedios más rápidos y baratos. El del ajo es uno de ellos. De todos es sabido que la halitosis es una enfermedad que padecen muchos ciudadanos que se sienten rechazados por su mal olor. Esto mismos ocurre con quien se atiborra de ajos. Pero como no hay mal que por bien no venga, en tiempos de pandemia como la del coronavirus, no hay nada más "saludable" que comerse un par de cabezas de ajo y a ver quien es el guapo que se te acerca. Sobran todas las medidas sanitarias habidas y por haber.
