La organización sindical, en un comunicado, ha explicado que estos puestos se corresponden por ley y por competencia profesional a otro tipo de profesionales, los psicólogos especialistas en Psicología Clínica (PEPC).
Los primeros pueden ejercer en el ámbito privado en funciones de evaluación, promoción y prevención de la salud psicológica pero no están habilitados para desempeñarse como especialistas clínicos en el sistema público, algo que solo pueden hacer los segundos.
Según Simebal, es la ley de ordenación de las profesiones sanitarias la que así lo establece y que marca que mientras la Psicología Clínica es una especialidad sanitaria regulada y reconocida oficialmente, el psicólogo general sanitario no es especialista y, por lo tanto, no puede ejercer como tal.
Es por todo ello que los sindicalistas han reclamado a la Conselleria de Salud que actúe "con la máxima prudencia" y garantice que la asistencia psicológica en la sanidad público sea realizada por psicólogos especialistas en Psicología Clínica y el reconocimiento del mérito profesional en el acceso al sistema público de salud.
El sindicato se ha mostrado abierto al diálogo y a la colaboración con la administración con el fin de mejorar la atención a la salud mental en Baleares y han propuesto, entre otras cuestiones, contratar a los psicólogos clínicos que actualmente estén disponibles.
También reforzar los dispositivos ya existentes en salud mental, promover mejoras en las condiciones laborales o abrir un proceso participativo y técnico para debatir sobre la estructura del Plan de Salud Mental.