El Ayuntamiento de Palma ha completado por primera vez un diagnóstico detallado sobre la situación de las personas sin hogar en la ciudad. Según ha revelado este lunes el alcalde, Jaime Martínez, durante su intervención inicial en el Debate de la Ciudad, en estos momentos hay unas 600 personas viviendo en asentamientos informales distribuidos por diferentes zonas del municipio.
Martínez ha asegurado que esta cifra se basa en un trabajo exhaustivo de identificación de todos los núcleos de asentamiento y de cada una de las personas que los habitan. “Solo con datos objetivos podremos abordar esta problemática con eficacia”, ha afirmado el alcalde, quien ha enmarcado esta actuación en el diseño de un plan municipal de atención a las personas sin hogar.
Como primera medida concreta, el alcalde ha anunciado la ampliación en 30 plazas del servicio de corta estancia, con el objetivo de mejorar la capacidad de respuesta inmediata ante situaciones de emergencia habitacional. Asimismo, ha destacado el impulso al proyecto del nuevo edificio de la calle Balanguera, destinado específicamente a mujeres sin hogar y madres monoparentales vulnerables.
Durante años, las cifras reales del sinhogarismo en Palma han sido objeto de estimaciones poco precisas, lo que ha dificultado el diseño de políticas públicas eficaces. Un caso paradigmático ha sido el uso de la antigua cárcel de Palma como alojamiento informal: mientras que las comunicaciones oficiales del Ayuntamiento cifraban en torno a 200 las personas que pernoctaban allí, fuentes internas del propio recinto elevaban esa cifra hasta 400 en determinados días, evidenciando una brecha significativa en el diagnóstico institucional.
Desde la oposición municipal, partidos como el PSIB y MÉS per Palma han reclamado reiteradamente en pleno la activación de recursos estructurales, especialmente en materia de vivienda social, y han cuestionado la falta de una estrategia a medio y largo plazo. En contraste, el equipo de gobierno, integrado por PP y Vox, sostiene una línea de actuación centrada en la gestión inmediata de la emergencia social, apostando por planes sectoriales como el anunciado este lunes, que priorizan la intervención puntual sobre colectivos especialmente vulnerables.