La cocina mallorquina es un festín de aromas mediterráneos, productos de la tierra y tradiciones que han pasado de generación en generación. Con influencias árabes, catalanas y campesinas, su recetario combina sencillez y carácter, con ingredientes humildes que se transforman en platos memorables. Desde el contundente frit mallorquí hasta la delicada ensaimada, cada bocado cuenta una historia de paisaje, mar y fogones familiares. En estas diez recetas imprescindibles descubrirás el corazón gastronómico de la isla, una invitación a saborear Mallorca con los cinco sentidos.
1. Tumbet
Ingredientes:
2 berenjenas
2 patatas
2 pimientos rojos
2 pimientos verdes
3 tomates maduros
2 dientes de ajo
Aceite de oliva
Sal
Preparación:
Para preparar un tumbet como toca, empieza cortando las berenjenas en rodajas y déjalas reposar con un poco de sal para que suelten el amargor. Mientras tanto, pela las patatas y córtalas finitas; fríelas en aceite de oliva hasta que estén doradas y crujientes. Haz lo mismo con los pimientos, primero los verdes, luego los rojos, y por último fríe también las berenjenas escurridas. Aparte, prepara una buena salsa de tomate casera sofriendo ajo picado y tomate rallado, y cocinándola hasta que espese. Cuando tengas todo listo, monta en una fuente por capas: patatas, berenjenas, pimientos y, al final, riega con la salsa de tomate. Mételo al horno unos 15-20 minutos y ya verás qué delicia mediterránea tienes entre manos.
2. Frit mallorquí
Ingredientes:
500 g de carne magra de cordero (o cerdo), hígado incluido
2 patatas
1 cebolla
1 cabeza de ajos
1 pimiento rojo
1 hinojo fresco (fonoll)
Guisantes (opcional)
Aceite de oliva
Sal, pimienta, laurel y guindilla (opcional)
Preparación:
El frit es uno de esos platos con carácter, de los que huelen a cocina de abuela. Empieza pelando y cortando las patatas en dados para freírlas hasta que estén doradas, y resérvalas. Luego sofríe en una sartén grande o greixonera los dientes de ajo enteros, la cebolla en tiras y los pimientos, y añade un buen puñado de hinojo fresco troceado, que le da ese toque tan nuestro. Incorpora los trozos de carne (mejor si usas mezcla de magro e hígado) y dales una buena fritura hasta que queden bien doraditos. Si te apetece, puedes añadir unos guisantes y un poco de guindilla para darle alegría. Cuando todo esté en su punto, vuelve a poner las patatas y mezcla bien para que cojan sabor. Sírvelo bien caliente y con pan, porque no vas a querer dejar ni una gota.
3. Sopes mallorquines
Ingredientes:
Pan moreno mallorquín cortado muy fino (pan de sopes)
1 col
1 cebolla
2 tomates
1 pimiento verde
2 dientes de ajo
Aceite de oliva
Pimentón dulce
Agua, sal, pimienta
Opcional: lomo, setas, sobrasada
Preparación:
Para unas buenas sopes, lo primero es tener pan moreno del día anterior, cortado finísimo. En una cazuela de barro sofríes ajo, cebolla, tomate y pimiento con un chorrito de aceite. Añade después la col bien picada y remueve con cariño. Echa un poco de pimentón dulce, sal, pimienta y cubre con agua. Cuando las verduras estén cocidas, apaga el fuego y coloca las rebanadas de pan en el fondo de otra cazuela o directamente encima, de manera que el pan chupe todo el caldo. Deja que repose un poco para que se mezclen bien los sabores. Si tienes por casa setas, un trozo de sobrasada o un poco de lomo, también se pueden añadir para enriquecerlo. Es un plato humilde pero reconfortante como pocos.
4. Arròs brut (arroz sucio)
Ingredientes:
300 g de arroz
200 g de carne (conejo, pollo o cerdo)
100 g de setas (níscalos o champiñones)
1 pimiento rojo
1 tomate
1 cebolla
2 dientes de ajo
Guisantes
Canela, clavo, pimienta, pimentón
Caldo
Aceite de oliva, sal
Preparación:
El arròs brut es un arroz caldoso lleno de sabor. En una cazuela sofríe trozos de carne (pollo, conejo, cerdo... lo que tengas) hasta que estén doraditos. Añade cebolla, ajo, tomate rallado, pimiento rojo y setas si es temporada, junto con una mezcla de especias que incluye pimienta, canela, clavo y un poco de pimentón. Cuando esté todo bien integrado, añade el arroz y sofríelo un poco antes de incorporar el caldo caliente, más o menos tres partes por una de arroz. Deja que hierva a fuego medio unos 20 minutos sin remover, y asegúrate de que quede caldosito. Se sirve caliente y humeante, perfecto para los días frescos o para reunir a la familia alrededor de la mesa.
5. Pa amb oli
Ingredientes:
Pan payés mallorquín (pan moreno)
Tomates de ramallet
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Acompañamientos: jamón serrano, queso mahonés, sobrasada, aceitunas trencades
Preparación:
El más sencillo y al mismo tiempo el más querido. Corta unas rebanadas de pan moreno de payés, que sea consistente y con buena miga. Parte un tomate de ramallet por la mitad y restriégalo con ganas sobre el pan, de modo que lo impregne bien. Luego echa un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y un poco de sal. A partir de ahí, lo que quieras: una loncha de jamón, un trozo de queso mahonés, unas aceitunas trencades o incluso un poco de sobrasada. Es un plato sin complicaciones, pero lleno de sabor y tradición.
6. Llom amb col (lomo con col)
Ingredientes:
6 filetes de lomo de cerdo
1 col grande
100 g de sobrasada
100 g de butifarrón
Pasas, piñones
1 cebolla
2 tomates
2 dientes de ajo
Vino blanco
Aceite de oliva, sal, pimienta, pimentón
Preparación:
Este plato es un clásico de los días de fiesta. Empieza escaldando las hojas de una buena col grande para que se ablanden y puedas manejarlas sin que se rompan. Aparte, sofríe ligeramente los filetes de lomo y resérvalos. En cada hoja de col coloca un trozo de lomo, un poco de sobrasada y butifarrón, unos piñones y pasas. Enróllalo como si fuera un paquetito y colócalos todos juntos en una cazuela. Haz un sofrito con cebolla, ajo y tomate, vierte un chorrito de vino blanco y coloca los rollos encima. Cocina a fuego lento durante unos 40 minutos hasta que la col esté bien tierna y los sabores se hayan mezclado. Es un plato sabroso, potente y muy típico del invierno.
7. Coca de trampó
Ingredientes:
Para la masa:
300 g de harina
100 ml de aceite de oliva
100 ml de agua
Sal
Para el trampó:
2 tomates
1 pimiento verde
1 cebolla
Aceite de oliva, sal
Preparación:
La coca de trampó es como la pizza mallorquina, pero más ligera y veraniega. Para la masa mezcla harina, aceite de oliva, agua y sal, amasa un poco y extiéndela fina sobre una bandeja. Luego prepara el trampó, que no es más que tomate, pimiento verde y cebolla todo bien picado, aliñado con sal y un chorrito de aceite. Reparte las verduras sobre la masa y hornea a 180 °C durante unos 30-35 minutos, hasta que los bordes estén dorados. Se come fría o templada, ideal para llevar a la playa o para un picoteo con amigos.
8. Gató amb gelat d'ametla (bizcocho de almendra con helado de almendra)
Ingredientes:
Para el gató:
200 g de almendra molida
200 g de azúcar
6 huevos
Ralladura de limón
Canela
Para el helado de almendra:
200 g de almendra
500 ml de leche
100 g de azúcar
3 yemas de huevo
Preparación:
Este postre es el broche perfecto. Para el gató, separa claras y yemas de seis huevos. Monta las claras a punto de nieve y, en otro bol, mezcla las yemas con azúcar, almendra molida, un poco de canela y ralladura de limón. Junta todo con suavidad y hornea a 180 °C unos 30 minutos. Para el helado, tritura almendras escaldadas y mézclalas con leche caliente. Añade una mezcla de yemas y azúcar, y cocina todo junto hasta que espese un poco. Luego deja enfriar y congélalo removiendo cada cierto tiempo para que quede cremoso. Sirve un trozo de gató con una bola de helado de almendra y prepárate para recibir aplausos.
9. Sobrasada torrada amb mel (sobrasada a la plancha con miel)
Ingredientes:
Sobrasada mallorquina
Miel
Preparación:
Este es un manjar sencillo pero con un contraste delicioso. Corta rodajas gruesas de sobrasada y ponlas en una plancha caliente solo unos segundos por cada lado, lo justo para que se fundan y cojan un poco de color. Sírvelas enseguida con un chorrito de miel por encima y, si quieres, acompáñalas con pan tostado. El dulzor de la miel con el toque especiado de la sobrasada es una combinación que sorprende a cualquiera.
10. Ensaimada mallorquina
Ingredientes:
500 g de harina de fuerza
100 g de azúcar
3 huevos
100 ml de agua
25 g de levadura fresca
Manteca de cerdo
Azúcar glas para espolvorear
Preparación:
La reina de los dulces mallorquines necesita paciencia, pero vale la pena. Mezcla harina de fuerza, azúcar, huevos, agua y levadura hasta obtener una masa elástica. Déjala reposar hasta que doble su tamaño. Luego estira la masa muy fina, unta con manteca de cerdo generosamente, enróllala formando un cilindro largo y dale forma de espiral sobre una bandeja. Déjala fermentar bien, idealmente toda la noche. Hornea a 180 °C hasta que esté dorada y espolvorea con azúcar glas una vez fría. Puedes hacerla lisa o rellenarla de cabello de ángel, crema o nata, pero incluso sola es una auténtica delicia.