Estas acciones llegan después de que el pasado 16 de septiembre fueran aprobadas por parte de la Comisión de Centro Histórico, ha informado el Consistorio en un comunicado.
Las intervenciones, que ya han empezado a ejecutarse y que continuarán hasta finales de octubre, incluyen las fachadas de edificios como Can Pujol, ubicado en el barrio de Santa Catalina y declarado Bien de Interés Cultura (BIC).
También las de las iglesias de Santa Catalina Thomàs y de la Inmaculada Concepció, así como del Auditorium de Palma.

Emaya, ha indicado el Ayuntamiento, ha reforzado de forma significativa sus servicios de limpieza de pintadas vandálicas en los últimos años.
97 POR CIENTO DE GRAFITIS BORRADOS QUE EN 2024
Entre enero y julio de este año, por ejemplo, la retirada de grafitis de edificios, mobiliario urbano y vía pública se han incrementado en un 97% respecto al mismo periodo de 2024.
"Esta notable reactivación no solo refleja el esfuerzo de los medios destinados a esta tarea, sino también la apuesta decidida por mantener una ciudad limpia y cuidada", ha reivindicado el regidor de Medio Natural y presidente de la empresa municipal, Llorenç Bauzá.
Cort ha recordado que la ordenanza de fomento de la convivencia cívica contempla sanciones económicas de hasta 3.000 euros para los autores de estas pintadas, especialmente si se realizan en edificios protegidos, catalogados o emblemáticos.