La medida forma parte de la estrategia del Ejecutivo autonómico para gestionar los espacios naturales con datos y comunicaciones en tiempo real, con el fin de redirigir los flujos de visitantes y reducir la presión sobre el medio ambiente, ha informado la Conselleria de Economía.
El proyecto ha sido desarrollado por la Agencia Balear de Digitalización, Ciberseguridad y Telecomunicaciones (IB Digital), dependiente de la Conselleria de Economía, Hacienda e Innovación, y se enmarca en la estrategia Territori Balear Intel·ligent.
Esta línea de trabajo cuenta con el impulso del IoTIB Lab, un espacio de pruebas y validación de soluciones tecnológicas sostenibles y fiables, en colaboración con la Universitat de les Illes Balears.
El pasado 28 de junio comenzó también la instalación de sensores para conocer la ocupación de los aparcamientos del Parc Natural de Mondragó, concretamente en s’Amarador y ses Fonts de n’Alís, lo que convierte a estas iniciativas en un banco de pruebas para extender la tecnología a otros espacios de las islas.
En ses Covetes se han colocado dos tipos de cámaras diferentes que registran los vehículos que entran y salen del aparcamiento utilizando modelos y procesamientos de imagen distintos.
Con estos datos se pretende ofrecer información precisa y en tiempo real, que permita a la administración regular el acceso y mejorar la distribución de visitantes en zonas de gran afluencia.
El Govern subraya que este proyecto piloto busca preservar entornos naturales protegidos evitando la saturación de vehículos y, al mismo tiempo, mejorar tanto la conservación del medio como la experiencia de los visitantes.
Además, se plantea como una oportunidad para situar a Baleares como referente europeo en el uso de la tecnología para cuidar el entorno, mejorar el turismo y facilitar la toma de decisiones a la ciudadanía.