El problema del acceso a la vivienda se está convirtiendo en algo muy serio en toda Balears. Ayer este digital informaba que desde el Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) de Balears, se advierte de que los inmuebles de alquiler en Palma están muy solicitados y apenas duran algunas horas en las agencias ante la fortísima demanda. En la isla de Eivissa la situaci´no se agrava y hace ya algunos años que ni siquiera existe oferta de alquiler en las inmobiliarias, lo que está haciendo que la falta de viviendas para el arrendamiento genere una situación “desesperada”, que favorece todo tipo de “abusos e irregularidades” y que incluso aboca a la marginalidad a trabajadores que se desplazan a la isla para trabajar en la temporada turística. La voz de alarma la ha dado la Mesa contra la Exclusión Social de Eivissa, foro del que forman parte entidades del tercer sector como Cáritas, Cruz Roja, Banco de Alimentos y Deixalles, entre otras.
Lo ideal sería que desde el Govern se impulse un plan de choque para buscar una solución
Urge que desde las diversas administraciones y de forma conjunta, se aborde esta problemática que va camino de convertirse en una de las más graves por su dimensión y por las implicaciones de todo tipo que conlleva. Hubo un tiempo ya lejano que existía una Conselleria d’Habitatge, cuando posiblemente el problema no era ni la mitad de grave de lo que es ahora, que incluso hace que sea difícil cubrir plazas en la función pública ante la imposibilidad de conseguir alojamiento digno a un precio razonable. Además, la especulación y la ilegalidad campas a sus anchas, por lo que lo ideal sería que desde el Govern se impulse un plan de choque para buscar una solución, con la participación de todos los sectores implicados. Las medidas paliativas que por parte de algunas administraciones se están adoptando, carecen de la fuerza necesaria y no dejan de ser más actuaciones de cara a la galería que medidas efectivas.