La Conselleria de Educación y Universidades ha publicado este jueves en el Boletín Oficial de Baleares (BOIB) las nuevas órdenes que regulan el proceso de evaluación del aprendizaje del alumnado de educación infantil, primaria, secundaria obligatoria y bachillerato.
Según ha informado la Conselleria en un comunicado, estas disposiciones responden a la necesidad de dar estabilidad al sistema de evaluación, evitando la dependencia de resoluciones anuales y garantizando una aplicación homogénea en todos los centros educativos.
Según han destacado, se reconoce la autonomía de los centros para decidir sobre la evaluación y el sistema de calificación, dando valor al criterio profesional del profesorado en la toma de decisiones.
Las órdenes tienen en cuenta las particularidades de cada etapa educativa y, según aseguran, se alejan de modelos rígidos y uniformes con el fin de mejorar los objetivos y la diversidad de las áreas o materiales.
Al mismo tiempo, se establecen actuaciones comunes para las sesiones de evaluación, para garantizar coherencia entre todos los centros educativos, y se concretan los momentos en los que las familias deben recibir información sobre las calificaciones de sus hijos.
Además, la Conselleria remarca que la forma de hacer llegar la información a las familias se ha simplificado ya que ésta se facilitará mediante un único documento final, con el objetivo de reducir la burocracia y mejorar la claridad.
En cuanto a la coordinación entre etapas, se determina la información que debe trasladarse a cada alumno. Por ejemplo, en el paso de Infantil a Primaria se compartirán datos relevantes sobre la lectoescritura, matemáticas y otros aspectos clave.
Finalmente, las nuevas órdenes establecen un procedimiento claro y transparente para gestionar posibles reclamaciones, tanto por parte de las familias, como de los centros, reforzando la seguridad jurídica y asegurando una resolución adecuada de las discrepancias.








