José Ramón Bauzá sorprendió ayer noche a la renovada directiva del PP-Balears. Sin perder de vista los flashes de la cámara y con el desterrado Andreu Ferrer a su derecha quiso pedir "unidad".
Su tono era el de la serenidad y su mirada la de un niño "que no ha romplut mai un plat". El mensaje estaba claro. Se trataba de pedir el "todos a una" y lo hizo. No lo dudó y tuvo su momento. Algo que algunos agradecieron aunque otros siguen con la mosca detrás de la oreja por si "qualquna en prepara". Eso o "pel Perú ens l' han canviat".
Sea como sea, ayer se agredeció el gesto de Bauzá. Ahora se trata de pasar de las palabras a los hechos y que la tan esperada reconciliación entre los diferentes bandos sea una realidad.