Mallorca tiene un nuevo motivo para brindar. Kimpton Aysla Mallorca, el refugio de lujo contemporáneo que redefine la hospitalidad en la isla, celebró su tercer aniversario con una velada exclusiva que reunió a invitados locales, creadores de contenido y huéspedes internacionales en un entorno que desprendía estilo, alma y conexión humana.
Fue el pasado 24 de octubre, en el sofisticado Zayt Pool Club, donde el hotel se vistió de gala para celebrar tres años de experiencias memorables, hospitalidad auténtica y compromiso con la comunidad. Una noche en la que la elegancia y la energía mediterránea se dieron la mano bajo el cielo estrellado de Palma de Mallorca.
UNA CELEBRACIÓN DE ESTILO, SABOR Y CONEXIÓN
Desde el primer momento, la atmósfera del evento atrapó a todos los asistentes. Las luces danzaban sobre el agua, la música envolvía los sentidos y cada rincón del Zayt Pool Club contaba una historia. El ambiente, cuidadosamente diseñado, reflejaba a la perfección el espíritu Kimpton: sofisticado, humano y lleno de vida.
Los invitados pudieron disfrutar de estaciones gastronómicas y cócteles en formato pass around, donde la creatividad culinaria fue la protagonista. Cada bocado, cada sorbo, celebraba la esencia de Mallorca: fresca, elegante y profundamente conectada con la tierra y el mar.
TRES AÑOS DE HOSPITALIDAD CON PROPÓSITO
Más allá del brillo de la celebración, este aniversario fue también una oportunidad para reafirmar los valores que definen a Kimpton Aysla Mallorca. Desde su apertura, el hotel ha buscado crear experiencias que combinan bienestar, arte, gastronomía y conexión emocional con el entorno.
Como parte de esta filosofía, el equipo de Kimpton realizó una donación a Mallorca Preservation, una fundación local que trabaja por la conservación del entorno natural de la isla. Este gesto, que ya se ha convertido en una tradición anual, refuerza el compromiso del hotel con la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente.
En un momento donde la responsabilidad ambiental es más importante que nunca, Kimpton Aysla Mallorca demuestra que el verdadero lujo también consiste en cuidar.
UN REFERENTE DE LUJO CONTEMPORÁNEO EN LAS ISLAS BALEARES
En solo tres años, Kimpton Aysla Mallorca se ha consolidado como uno de los destinos más inspiradores de las Islas Baleares. Su propuesta combina diseño vanguardista, hospitalidad cálida y una filosofía de bienestar integral.
El hotel ha logrado algo poco común: fusionar el ritmo cosmopolita con la calma mediterránea. Su arquitectura, sus espacios abiertos y su atención personalizada lo han convertido en un punto de encuentro tanto para viajeros internacionales como para residentes de la isla.
Cada detalle, desde su gastronomía hasta su spa, habla de una visión clara: hacer que cada estancia sea una experiencia emocional, un momento para reconectar con uno mismo y con la belleza natural de Mallorca.
ZAYT POOL CLUB, EL CORAZÓN SOCIAL DE KIMPTON AYLSA
El escenario elegido para la celebración no fue casual. Zayt Pool Club es mucho más que una piscina: es el alma social del hotel, un espacio donde el diseño se mezcla con la relajación y la buena conversación.
Durante la velada, el club brilló en su máximo esplendor. Las luces, la música y el sonido del agua crearon una sinfonía de sensaciones que hizo de la noche algo inolvidable. Fue un recordatorio de por qué Kimpton Aysla Mallorca no solo es un lugar para alojarse, sino para sentir.
UN FUTURO CONSCIENTE Y APASIONADO
A medida que Kimpton Aysla Mallorca entra en su cuarto año, el compromiso es claro: seguir creciendo sin perder la esencia. Continuar siendo un espacio donde el lujo se vive desde la autenticidad, donde cada huésped encuentra inspiración y donde el respeto por la isla marca cada decisión.
Tres años no son solo una cifra, son una historia compartida, un trayecto de momentos, personas y emociones. Y si algo dejó claro esta celebración, es que Kimpton Aysla Mallorca aún tiene muchos capítulos por escribir en su historia de hospitalidad con propósito.
