Día grande para el empresario Gabriel Sampol en el Castillo de Bellver con motivo de la entrega de la medalla al Mérito en el Trabajo, impuesta en nombre del Estado por el delegado del Gobierno, Ramón Socias y con la asistencia de la primera autoridad de las Islas, el presidente Bauzá. Por parte empresarial, y además del máximo responsable de la Caeb, asistieron dos empresarios destacados de las Islas, Pedro Serra y Pablo Piñero, cabezas visibles de los grupos que llevan sus apellidos y cuyas familias se llevan muy bien con las del montuirenç homenajeado. Pero en el acto del Bellver se echó a faltar la presencia de los grandes del turismo y que fueron históricos clientes de Sampol Ingeniería, como Gabriel Escarrer, Miguel Fluxá y Carmen Ríu, y sobre todo, Simón Pedro Barceló, con quien compartiera sociedad en el fallido hotel de Barajas. ¿Por qué no acudieron estos notables a un acto tan señalado para el empresario singular que de la nada ha gestado una empresa con presencia en decenas de países extranjeros, encontrándose todos ellos ese día en Palma? Serra y Piñero no dejaron sólo al inquieto Gabriel Sampol.
